1/ Los cuidados día a día
Cuidar tu casco es fácil, al final del día en las pistas de esquí, recuerda secar bien tu casco antes de guardarlo en su funda protectora.
Si está mojado, aunque sea un poco, la humedad no se evaporará, comprometiendo así su comodidad y permitiendo la aparición de malos olores.
También hay que evitar colisiones con el casco al volver al alojamiento, y en general, para conservar su eficacia.