Tu fiel compañero en los fairways, siempre ahí, llueva o truene, lleva tu bolso sin quejarse, nunca duda en caminar kilómetros contigo, pero ¿lo cuidas tan bien como él te cuida a ti? Para mantener su carrito de golf y recuperar su esplendor, siga estos pocos consejos.
Aprovecha que estás en tu club de golf para limpiar tu carrito. La mayoría de los clubes ofrecen acceso a un lavado de coches con aire comprimido y chorro de agua. Puedes utilizar cualquiera de los dos para limpiar el césped y la suciedad acumulados por tu carrito en los campos. Además de conservar tu carrito, esto evitará que tu coche se ensucie.
Una vez que llegues a casa, puedes enjuagar las partes más delicadas con agua limpia para eliminar toda la suciedad.
La principal ventaja de los carritos, además de no tener que llevar la bolsa, es su practicidad: se pliegan fácilmente para ahorrar espacio. Para mantener el carrito plegado, compruebe siempre que no haya nada que obstruya los mecanismos. Las ramitas, la hierba o la suciedad pueden bloquear la rotación de los tubos. Si esto sucede regularmente su carrito se dañará.
Durante la temporada baja, si no vas a jugar durante varias semanas, pliega y despliega tu carrito para que el movimiento continúe sin problemas.
Para que su carrito funcione sin problemas, es importante cuidar sus ruedas. Si notas que la suciedad está obstruyendo los radios de la rueda, puedes enjuagarlos con agua limpia. También puedes engrasar el rodamiento de bolas de la rueda una vez al año para evitar que se oxide.
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Si cuidas bien tu carro, éste te acompañará en todos tus fairways durante varios años. Para asegurarse de disfrutar de su estancia sin infringir las reglas del campo de golf en el que está jugando, recuerde preguntar si se permiten carritos en los campos.
